Adaptación del REA “Un mundo de Poesía” a los tiempos de la teledocencia

 

La experiencia que voy a contar ahora aquí responde al REA de Secundaria “Un Mundo de Poesía”, proyecto que inicio este curso con los dos grupos de tercero de la ESO del IES Torre Atalaya (Málaga), en los que imparto docencia de Lengua Castellana y Literatura, y que las circunstancias de confinamiento, provocadas por la irrupción del COVID-19, me han obligado a terminarlo “a distancia” u “on line”.

Mi camino hasta los REA

Conocía los recursos EDIA para esta materia desde el curso pasado, había visto sus diferentes proyectos e incluso había leído algunas experiencias didácticas, que me habían animado a llevarlas a cabo viendo los resultados que otros compañeros/as habían obtenido en sus aulas. No obstante, trabajo en un centro donde el alumnado está acostumbrado a seguir una metodología tradicional y el trabajo cooperativo, el aprendizaje basado en proyectos o las propuestas lúdicas son, en ocasiones, mal interpretadas; ya que ven en ellas un mero entretenimiento y el examen de contenidos como la única prueba con peso en la materia. Además, contamos con una ratio muy elevada, nuestras aulas están a 32-33 alumnos/as y el espacio que tenemos para realizar posibles modificaciones en la clase es bastante limitado.

A pesar de ello, he realizado diferentes propuestas de trabajo, puntuales en el tiempo, tratando de hacer ver a mi alumnado que otras metodologías son posibles y que el proceso de aprendizaje puede ser tan efectivo o más que un examen, cuyos contenidos suelen olvidar al día siguiente. Además, como responsable de la biblioteca del IES Torre Atalaya también he empleado ese espacio para llevar a cabo diferentes propuestas. Puede verse en la página del Blog de la biblioteca, el cual coordino y gestiono, en el apartado de entornos informacionales como “Proyecto aula-biblioteca” o “Un cómic medieval”.

#EDIAUnMundoDePoesía con mi alumnado

Este curso me he encontrado con dos grupos de 3º de la ESO de 22 y 25 alumnos/as por clase, 3º ESO F y 3º ESO E, respectivamente, dado que corresponden a los grupos que tienen al alumnado de PMAR y que a la hora de mi clase salen con su profesorado del Ámbito Lingüístico y Social. Además, en el caso del primero de los grupos, muchos de ellos procedían de un centro de primaria, el CEIP Rectora Adelaida de la Calle, el cual trabaja con metodología ABP. Tuve además el placer de conocer en persona a Sergio Mata (@sergmata1), profesor de Lengua Castellana y Literatura también de Málaga, en unas jornadas de formación, y de que en uno de sus tweets me animase a colaborar en la puesta en práctica el proyecto #EDIAUnMundoDePoesía que estaba realizando con su alumnado de primero de bachillerato. Así que guiada por las circunstancias, me propuse llevarlo a cabo sin saber cuál sería la acogida, pero con la intuición de que de este proyecto saldríamos aprendiendo todos/as, mi alumnado y yo.

De este modo, el 24 de febrero, justo antes de las vacaciones de Semana Blanca (periodo festivo en Málaga), planteé a mi alumnado el proyecto #EDIAUnMundoDePoesía. La primera sorpresa fue la acogida tan buena: saben que me gusta ofrecer distintas propuestas didácticas en el aula y que no me importa rectificar y buscar otras vías cuando los resultados no son los deseados. La idea de trabajar un contenido como era la poesía del Renacimiento y del Barroco mediante un proyecto en el que podían colaborar entre ellos les gustaba, pero también observé cierto desinterés en el alumnado que no le atraía la literatura y que, además, la poesía les parecía un suplicio. Muchos de ellos ya se habían enfrentado en cursos anteriores y no tenían muy buen recuerdo. Además, ya habían tenido un primer contacto con la lírica medieval y el uso del castellano antiguo les provocaba una falta de comprensión.

Un mundo de poesía se trata de un recurso original de @bloggeando, que cuenta con una adaptación #EDIAUnMundoDePoesía de Marian Calvo (@Hautzaen) para el Renacimiento y el Barroco. Me inspiré en esa adapación, ya que se centraba en este periodo concreto y los recursos que ofrecía me parecían muy apropiados. A Marian, no tengo el placer de conocerla en persona, pero sí conozco sus recursos didácticos y he puesto en práctica alguno de ellos, véase Juicio a Lázaro. Además, tal y como ella sugiere, preparé un entorno informacional donde poder ir compartiendo los recursos que, tanto el alumnado como yo, iríamos generando, que quedaría como producto del mismo y que mi alumnado podía consultar fácilmente desde mi blog de aula.

Secuencia del proyecto por tareas

De este modo, una vez planteado el proyecto, la primera actividad con la que nos iniciábamos fue “¿para qué sirve la poesía?”. Esta actividad se dividía a su vez en dos pasos. En un primer paso, mediante una rutina de pensamiento, color, símbolo e imagen y la canción de Pablo López “El patio”, visibilizamos las emociones, compartimos sentimientos y nos ayudó a contextualizar el proyecto. Ha sido, sin duda, una de las actividades con mejor acogida y que ha favorecido el buen ambiente del proyecto en general.

En un segundo paso, mediante la estructura cooperativa 1-2-4, reflexionamos sobre el artículo de El País “¿De qué les sirve la poesía a los poetas?”, que se publicó con motivo del Día de la Poesía, buscando puntos en común, escribiéndolos y exponiéndolos al resto del grupo-clase. Me sorprendieron gratamente sus respuestas e incluso en aquellos que, en un principio, se habían mostrado más reacios, se observaba un cambio de actitud.

La segunda actividad nos llevaba a introducirnos en la investigación de los poetas del Renacimiento y Barroco, trabajar el contexto histórico, las características de las diferentes etapas literarias y conocer a cada uno de los autores/a con lo que íbamos a trabajar más adelante. Mi alumnado no dispone de medios TIC en el aula, salvo la pizarra digital, así que me pareció conveniente que empleasen su libro de texto, el cual iría apoyado con el material de @Hautatzen que estaría disponible en la pizarra digital y consultado por ellos/as en el aula y en sus casas. Para llevar esta segunda actividad, les propuse un guión a seguir para facilitarles la elaboración de sus propios apuntes.

Adaptación del proyecto al contexto actual

La tercera actividad era visualizar y leer en clase la antología preparada para trabajar este proyecto y el reparto de poemas por grupo, uno del Renacimiento y otro del Barroco. Sin embargo, esta sería la última actividad presencial que tendría la oportunidad de realizar con ellos/as. El 12 de marzo, la Junta de Andalucía anunciaba el cierre de los centros escolares, y el viernes 13, básicamente, me dio tiempo a tranquilizar a los que vinieron, a darles ánimos y a asegurarles que seguiríamos en contacto.

Durante ese fin de semana creé con Google classroom las clases que tenía y decidí continuar con el proyecto que habíamos planteado. Ellos y ellas conocían los pasos a seguir y lo único era establecer un plan de trabajo, que me permitiera darles un mejor feedback, así como guiarles en su proceso de autoevaluación. Generé un cronograma que correspondía al plan de trabajo, adjunté un audio para que no se encontrasen muy perdidos y creé diferentes entradas, en el apartado de ‘Trabajo de clase’, para las actividades a realizar. Por supuesto, en todo ello, favoreció que el alumnado respondiera rápidamente a mi llamada en classroom y que, en dos días, tenía al 100% de la clase virtualmente conectada.

La primera entrega por classroom correspondió a esa actividad 3, cuya fecha de entrega propuse para justo el viernes 20 de marzo, dándoles esa semana para prepararla y consultar las posibles dudas conmigo y poniendo en común la tarea entre los miembros del grupo. Los resultados obtenidos de esta primera actividad virtual fueron bastante buenos y no me refiero a los contenidos, donde seguramente habrá carencias que podría haber solventado con una breve explicación en mi clase presencial, me refiero a su capacidad de autonomía, de conectarse entre ellos para ponerse de acuerdo, y de preguntar dudas a través de la mensajería privada que ofrece classroom.

Después de esta actividad, tocaba evaluar los contenidos aprendidos. Diseñé con Google Form un cuestionario. La idea era recoger en él los contenidos más significativos y que les sirviese de autoevaluación. Utilicé mi hora de Lengua en cada clase y pregunté con anterioridad si tenían algún problema para conectarse. En ambas clases han realizado el 90% la prueba tipo test en horario de clase y al resto (dos, en cada una de ellas) les he dado la posibilidad de realizarlo posteriormente. Entiendo que no todos tienen las mismas circunstancias y mi intención no era obtener una nota numérica, sino que ellos pudieran realizar una autoevaluación de los contenidos trabajados.

La última actividad con la que finalizábamos este proyecto respondía a la actividad ‘Reflexionamos’. Decidí que, aun no siendo la última que estaba planeada, sí podría ser un buen cierre, dadas las circunstancias en las que nos encontrábamos.

Los resultados de esta actividad han sido muy positivos y la respuesta de ellos/as ha sido, en general, muy buena. Para llevarla a cabo les proporcioné de nuevo una plantilla con una serie de preguntas que les permitía preparar a modo de borrador su escrito. En el feedeback dado, algunos alumnos/as me han pedido repetir esta última actividad, ya que no se habían ajustado a lo pedido. Soy consciente de que, ahora más que nunca, la solución no pasa por entregar tareas sin más para cubrir el expediente, sino que debemos ser flexibles y ofrecer guías muy claras para la evaluación de las tareas, por lo que les he permitido que lo repitan y vuelvan a entregar.

Valoración general del proyecto/ Conclusiones

Con la aplicación de este REA he vivido dos situaciones muy distintas: la presencial o en el aula y la “a distancia” u “on line”. De la parte presencial, solo puedo decir que la sensación ha sido estupenda. Las sesiones se hacían más cortas, las clases eran muy dinámicas y el verlos trabajar entre ellos, poner sus opiniones en común y argumentarlas, me ha parecido una de las sensaciones más gratificantes que tiene esta profesión. De la parte no presencial o “a distancia”, creo que el éxito del proyecto ha radicado en la existencia de un plan de trabajo específico desde el principio, unas secuencias de trabajo marcadas en el tiempo, un sistema de autoevaluación y un feedback que han permitido que el alumnado trabaje de manera autónoma.

En definitiva, considero que los REA son una excelente oportunidad de trabajo no solo en el aula, sino también “a distancia”. Eso sí, ahora más que nunca, nos obliga a tener muy en cuenta las 4 ideas clave sobre la ‘teledocencia’ que se exponen desde el Cedec.