Aproximación a los ODS desde los REA del Proyecto EDIA

Introducción

Mi nombre es Laura Ramiro Béjar y actualmente soy profesora de Inglés en IES Maimónides de Córdoba. Este artículo está basado en mi experiencia con un grupo de alumnado de 4º de ESO del IES Mario López en Bujalance, provincia de Córdoba, donde trabajamos la situación de aprendizaje «Introduction to the Agenda 2030: Sustainable Development Goals» en el curso 2022-2023. En este Instituto se imparten enseñanzas de ESO, Bachillerato y Ciclos Formativos.

Origen de la experiencia

Sinceramente no recuerdo exactamente cómo empezó mi interés por el universo de los REA. Lo que sí recuerdo es encontrar (por casualidad) la web de CEDEC y conocer, no sólo los recursos que estaban ya publicados, sino muchísima información de interés para el profesorado. Se podría decir que fue “amor a primera vista”.

Empecé a investigar y poco a poco conocí a otros compañeros y compañeras que trabajaban en esta línea. Ese mismo año fui coordinadora de un grupo de trabajo en el centro, y como quería aprender más sobre los REA, decidí dedicarlo a este tipo de materiales y su inclusión en el aula. No fue nada fácil cambiar patrones o costumbres que tenemos preestablecidos desde hace años, sin embargo, y gracias a un grupo de profesores y profesoras con experiencia en este ámbito, pude dar mis primeros pasos en este maravilloso mundo.

Inclusión de la propuesta en la Programación didáctica de la materia y la propuesta curricular de la etapa

El conocimiento de recursos REA en mi centro por parte de mis compañeros y compañeras era muy escaso, algunos conocían de su existencia, pero nunca los habían usado en clase.

Elegí esta situación de aprendizaje gracias a su creadora, mi compañera y ahora también amiga Piedad Isabel Garrido, mi referente en el mundo de los REA, gran profesional y fantástica persona que siempre me ha ayudado, motivado (y a veces también convencido) para seguir adelante en este fantástico, pero también complicado mundo. ¡Gracias, Isabel!

Este REA se llevó a cabo con un grupo de 10 alumnos/as (9 chicos y una chica), de 4º de ESO. Sorprendentemente todos tenían un nivel de inglés bastante bueno, aparte de estar profundamente motivados por el aprendizaje de esta lengua. Algunos ya tenían un certificado B2 que habían obtenido en la academia de su pueblo.

El proyecto se incluyó en la Programación de 4º de ESO sin ningún inconveniente por parte del equipo directivo, tampoco del resto de miembros de mi departamento.

Descripción detallada de la experiencia:

Esta situación de aprendizaje está pensada para alumnado de 1º y 2º de ESO, por lo que tuve que adaptarla al nivel de mi alumnado en algunos aspectos.

La primero fue acercarnos a la Agenda 2030, conocer en qué consiste, cuáles son los objetivos, su origen, etc. Esto fue posible a través de los vídeos introductorios. Resultó gratificante comprobar que el alumnado había oído hablar de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), incluso habían trabajado con ellos en otras materias.

  • La primera tarea consistió en la redacción de un cuestionario en la plataforma Quiz para comprobar el conocimiento que tenían sobre la Agenda 2030. Los alumnos elaboraron en parejas los cuestionarios y una vez terminados se compartieron con el resto del grupo.
  • La segunda tarea consistió en escribir y poner música a un rap que ellos mismos escribieron. Tengo que admitir que algunos no estaban muy contentos con este trabajo, no entendían por qué tenían que hacer un rap en clase de inglés. Otros, sin embargo, aprovecharon para presumir de sus dotes musicales e incluso quisieron ponerle música.
  • El producto final fue la edición de un vídeo donde tenían que promocionarse como verdaderos “changemakers”. Esta tarea fue individual. Tengo que admitir que me sorprendieron gratamente, no sólo porque demostraron que habían conseguido adquirir perfectamente los objetivos de esta situación de aprendizaje, sino por su manejo de las herramientas tecnológicas y digitales.

 

 

Como actividad complementaria se organizó una salida a una zona cercana al pueblo con el objetivo de recoger limpiarla y recoger basura. Los alumnos crearon un cartel digital que se publicó en la web del Instituto. En esta actividad participaron dos grupos de 4º de ESO.

 

Por último, el alumnado de 4ºB trabajó por grupos en el diseño y posterior presentación en clase de un trabajo dedicado a un problema medioambiental por el que se sentían preocupados. Los estudiantes presentaron sus carteles en el aula y explicaron las posibles soluciones a los diferentes problemas y su vinculación con la Agenda 2030.

Evaluación del aprendizaje y de la propia experiencia.

La evaluación de este proyecto se hizo utilizando rúbricas que los alumnos tenían para cada una de las tareas y proyecto final, evaluaron también el trabajo de sus compañeros. Para la evaluación general del proceso de aprendizaje y la propia experiencia, se elaboró un formulario a nivel de centro que completaron al final del trimestre. En este formulario, el alumnado expuso sus reflexiones en tres vertientes relacionadas al REA que habíamos desarrollado. La primera respecto al impacto que contemplaron al utilizarlo, la segunda en torno a las dificultades para su uso, y la tercera contempló los posibles logros en términos de aprendizaje.
Para la realización de las tareas se hizo uso de los portátiles del centro que teníamos reservados al menos dos veces por semana.

Valoración global:

La experiencia fue muy positiva, tanto para alumnado como para mí como docente. El 100% se implicó favorablemente en la consecución de las tareas propuestas, propiciando de esta manera una educación inclusiva que atendía a las necesidades de todos y todas por igual. Los resultados y evidencias servirán de base para la identificación de principios de diseño y estándares pedagógicos que permitan orientar al profesorado y potenciar los beneficios de los REA sobre el aprendizaje del alumnado.

Estos materiales ofrecen oportunidades de aprendizaje significativo y de desarrollo de trabajo cooperativo, iniciativa personal y aprendizaje autónomo, alejándose de los tradicionales y “en muchos casos” aburridos libros de texto.

Los contenidos de esta situación de aprendizaje son fiables, suficientes y adecuados al nivel educativo y a los objetivos propuestos. Además, proporcionan instrucciones claras indicando el papel del alumnado y la modalidad de trabajo (individual o colectiva) en cada momento. Se proponen actividades de interés que ayudan a reforzar los saberes.

Personalmente estoy segura de que esta experiencia ha facilitado procesos de reflexión, análisis y mejora de mis competencias como profesora.

La principal dificultad que nos encontramos fue el desajuste entre el tiempo programado para la aplicación de las tareas y el tiempo real necesario, o la presentación de algunos contenidos. Por otra parte, también me costó (y aún me cuesta) cambiar pautas y rutinas del alumnado e incluso mías que tenemos preestablecidas a la hora de aprender.

Recomendación final:

El uso de REA es indiscutible hoy en día para cualquier profesor/a que esté comprometido con su trabajo. No podemos olvidar que “educar es compartir”. Si un docente no está compartiendo lo que él/ella hace con sus estudiantes, entonces, no está educando.

Hoy en día el profesor debe estar preparado para adquirir nuevas metodologías y ser capaz de impartirlas. Cada clase o curso son diferentes y, por tanto, el saber diferentes modos de enseñanza será beneficioso para el aprendizaje de los estudiantes. El uso de los REA en el aula nos permite promover la enseñanza con las nuevas tecnologías y medios digitales, permitiendo al alumnado adquirir recursos digitales y aprender a usarlos de manera responsable y segura.

“Llegar juntos es el principio. Mantenerse juntos, es el progreso. Trabajar juntos es el éxito”.