Implicaciones del uso de dispositivos móviles en edades tempranas

En general, y tras la pandemia, el acceso a dispositivos móviles ha aumentado debido a una combinación de algunos factores, como la disminución de los precios de los dispositivos, el aumento de la conectividad a Internet y la disponibilidad de aplicaciones y contenido dirigido a niños y adolescentes.

Según el Observatorio Nacional de Tecnología y Sociedad en su informe «El uso de las tecnologías por los menores en España» :

• Un 98% de menores (10 a 15 años) españoles usa Internet de forma habitual desde la pandemia.
• En los últimos dos años el porcentaje de niños y niñas entre 10 y 15 años que emplean el ordenador ha pasado del 90 al 95%.
• Siete de cada diez menores tienen teléfono móvil. El uso es mayoritariamente femenino (72% frente a 65%).

Basta mirar hacia cualquier sitio y los datos y resultados de estos estudios se nos hacen «cortos» cuando vemos por nuestros propios ojos como es la presencia de las pantallas en nuestras vidas.

Dentro de las distintas competencias clave que la LOMLOE establece, pone en valor, de forma lógica y ante los datos de los estudios anteriores, la Competencia Digital referida en la norma como:

La competencia digital implica el uso seguro, saludable, sostenible, crítico y responsable de las tecnologías digitales para el aprendizaje, para el trabajo y para la participación en la sociedad, así como la interacción con estas.

 

Incluye la alfabetización en información y datos, la comunicación y la colaboración, la educación mediática, la creación de contenidos digitales (incluida la programación), la seguridad (incluido el bienestar digital y las competencias relacionadas con la ciberseguridad), asuntos relacionados con la ciudadanía digital, la privacidad, la propiedad intelectual, la resolución de problemas y el pensamiento computacional y crítico.

Si observamos los descriptores operativos de los perfiles de salida tanto al completar la Educación Primaria, como la Enseñanza Básica veremos que hay muchas referencias a los riesgos, la seguridad, las medidas preventivas o a la ciudadanía digital, es por ello que se hace necesario una reflexión crítica desde distintos ámbitos del día a día del alumnado en su interacción con las tecnologías digitales.

El mito de Prometeo

Internet y los dispositivos móviles recuerdan al mito griego del robo del fuego por parte de Prometeo. Éste robó el fuego de los dioses y se lo dio a los humanos. Esta invención tuvo consecuencias negativas, ya que los humanos empezaron a usar el fuego para la guerra y la destrucción. Sin embargo, también tuvo un lado positivo, ya que el fuego permitió a los humanos cocinar alimentos, mantenerse calientes y desarrollar herramientas y tecnologías. Este mito muestra cómo en los tiempos actuales sigue vigente esa doble mirada sobre cualquier hecho y así, estos datos de penetración del uso de las tecnologías en menores en la sociedad en general y en los menores en particular tendrá por supuesto sus bondades y sus perversiones.

Veamos los aspectos positivos y negativos que tiene el uso de las tecnologías digitales en el ámbito personal, familiar o social:

El uso de tecnologías digitales por parte de menores ofrece diversas bondades en diferentes ámbitos de sus vidas.

• En el ámbito personal, las tecnologías digitales brindan a los menores acceso a una gran cantidad de información y recursos, lo que promueve la exploración de intereses individuales. También pueden desarrollar habilidades digitales y creativas a través de la producción de contenido digital.
• En el ámbito familiar, las tecnologías digitales permiten a los menores mantenerse conectados con sus seres queridos, incluso a distancia, fortaleciendo las relaciones y facilitando la comunicación. Además, pueden disfrutar de actividades lúdicas en línea con sus padres o hermanos, fomentando momentos y ocasiones de estar en familia.
• En el ámbito social, las tecnologías digitales ofrecen oportunidades de interacción con otros jóvenes de todo el mundo, lo que promueve la diversidad cultural y el intercambio de perspectivas. Además, los menores pueden participar en comunidades en línea que comparten intereses similares, lo que fomenta la colaboración y el aprendizaje conjunto. El uso de tecnologías digitales en ámbitos sociales puede ampliar el acceso a la información, promover la inclusión y potenciar la participación cívica y el activismo.

Pero también está la cara negativa del uso de estas tecnologías.

• En el ámbito personal, el acceso a contenido inapropiado o peligroso en línea puede exponer a los menores a situaciones perjudiciales para su bienestar emocional y desarrollo. Además, el uso excesivo de dispositivos electrónicos puede llevar a problemas de salud, como la adicción, el aislamiento social y el deterioro de las habilidades sociales cara a cara.
• En el ámbito familiar, el mal uso de las tecnologías digitales puede generar conflictos y dificultades en las relaciones familiares, especialmente si hay una falta de comunicación y límites claros. El abuso de las redes sociales y las plataformas de mensajería puede dar lugar al ciberacoso y la pérdida de privacidad, lo que puede tener consecuencias negativas para la seguridad y el bienestar emocional de los menores.
• En el ámbito social, el mal uso de las tecnologías digitales puede llevar a la exposición a contenidos violentos, discriminatorios o manipuladores, lo que puede afectar la percepción y el comportamiento de los menores. Además, el anonimato en línea puede fomentar comportamientos irresponsables y ciberbullying, lo que puede tener un impacto significativo en la salud mental y emocional de los menores y la dinámica social en general.

Y en el ámbito educativo también podemos ver los aspectos positivos y negativos:

El uso de tecnologías digitales por parte de menores en el ámbito educativo ofrece numerosas bondades.

Estas tecnologías permiten al alumnado acceder a una amplia variedad de recursos educativos en línea, como bibliotecas virtuales, vídeos educativos y plataformas interactivas, enriqueciendo su proceso de aprendizaje y fomentando la adquisición de conocimientos de manera más dinámica y personalizada. Además, las tecnologías digitales facilitan la colaboración entre el alumnado, permitiéndoles trabajar en proyectos conjuntos, compartir ideas y retroalimentarse mutuamente, fomentando así el aprendizaje colaborativo y el desarrollo de habilidades de trabajo en equipo. Asimismo, las tecnologías digitales brindan a los alumnos y alumnas la oportunidad de desarrollar habilidades digitales fundamentales para su futuro, como la alfabetización digital, el pensamiento crítico y la resolución de problemas, preparándolos para un mundo cada vez más digitalizado y tecnológico.

También, en el mismo ámbito, puede presentar ciertas maldades.

Uno de los riesgos es la distracción constante que ofrecen las tecnologías, lo que puede dificultar la concentración y el enfoque en las tareas académicas. Además, el acceso ilimitado a internet puede exponer al alumnado a contenidos inapropiados o no verificados, lo que puede llevar a la desinformación y la propagación de noticias falsas. Asimismo, el uso excesivo de tecnologías digitales puede conducir a un estilo de vida sedentario y a la falta de actividad física, lo cual es perjudicial para la salud y el bienestar de los estudiantes. Por último, el abuso de las tecnologías digitales en el ámbito educativo puede contribuir a la disminución de habilidades de comunicación interpersonal y a una dependencia excesiva de la tecnología como única fuente de aprendizaje, limitando la interacción y el desarrollo de habilidades sociales clave.

¿Qué podemos hacer para que las cuestiones positivas sean las preponderantes sobre las negativas?

Tanto las familias como los docentes tienen el deber de educar en este ámbito pues el futuro será digital sin lugar a dudas y los niños y niñas de hoy pasarán buena parte de sus vidas, en lo personal y en lo laboral muy vinculados a lo que sucede tras una pantalla.

En el ámbito familiar sería muy positivo:

• Establecer límites y horarios con ellos y fomentar otras actividades.
• Supervisar y regular el contenido y estar atentos a los cambios de humor.
• Fomentar la comunicación abierta, siempre necesaria y no solamente en este campo.
• Educar sobre la seguridad en línea dentro de las posibilidades de cada uno.
• Ser un modelo a seguir, pues para ellos es importante.
• Acompañar y participar activamente en actividades vinculadas a las tecnologías digitales junto a ellos.

En el ámbito educativo también podemos establecer algunas pautas positivas:

• Establecer metas claras de aprendizaje antes de usar las tecnologías.
• Utilizar las tecnologías digitales como herramientas para enriquecer y complementar la enseñanza.
• Fomentar una cultura de ciudadanía digital positiva y promover el respeto y la empatía en línea.
• Personalizar el aprendizaje, con diferentes recursos y actividades adaptadas.
• Promover la colaboración y el trabajo en equipo
• Realizar evaluaciones periódicas para medir el impacto de las tecnologías digitales en el aprendizaje del alumnado.

En definitiva la sociedad debe acompañar «educando en lo digital» desde todos los frentes, en las posibles  implicaciones que el uso de las tecnologías digitales tienen en los menores en general, y como ya sabían en el mundo griego y nos decía el mito de Prometeo, conservar y disfrutar del fuego y sus bondades sin quemarnos o producir incendios.