Los talleres de recreación histórica, un recurso docente que humaniza el hecho histórico

 

El profesorado, cuando prepara los materiales y revisa las estrategias y recursos con los que planifica su labor docente, busca motivar a su alumnado. La motivación es la clave para que nuestro alumnado aprenda. Los maestros buscamos despertar su interés. Esta tarea, en ocasiones, no es sencilla, ni fácil; pero en la Escuela de Arte «Casa de las Torres» de Úbeda parece no ser un problema.

Nuestra Escuela se encuentra ubicada en un sitio único, excepcional diría. Nos hallamos en un palacio plateresco del siglo XVI, ubicado en el casco histórico de una ciudad Patrimonio de la Humanidad y desde cuyas torres se divisa todo el valle del río Guadalquivir. En una guerra sería el emplazamiento elegido por el alto Estado Mayor de nuestro ejército para planear el plan de ataque y obtener la victoria.

Casa de las Torres. Wikipedia

  VICTORIA. Curiosa palabra ésta porque en relación al tema que nos ocupa los libros de Historia que maneja nuestro alumnado, nos dirán que la Gran Guerra la ganaron los aliados. Yo no lo tengo tan claro. ¿Se puede celebrar la muerte de más de diez millones de seres humanos?. ¿Podemos festejar que entre cinco y seis millones de personas sufrieron mutilaciones de alguno de los miembros de su cuerpo?. Es para congratularse que una generación entera de jóvenes europeos y de las posesiones coloniales vieran truncadas sus ilusiones, sus proyectos de vida por culpa de una maldita guerra que sembró la semilla del odio y del rencor en el bando de los derrotados, hasta el punto de producir un nuevo enfrentamiento, aún más sangriento y cruel, veinte años después de la firma del armisticio.

 

Creo que el sentir de la mayoría es que la Primera Guerra Mundial no la ganó nadie, sino que la perdieron todos”. Esta afirmación tan contundente como lapidaria, no está recogida en ningún libro de texto, ni en ningún manual de Historia del siglo XX, ni en ninguno de los links que nuestro alumnado consulta para elaborar las tareas del REA La Guerra que cambió el mundo que, en la actualidad, nuestro alumnado está trabajando a través del proyecto #ReadictasalaHistoria junto al alumnado de otros centros de la geografía nacional. ¡No! Estas palabras son la conclusión que un espectador saca tras participar en el taller de recreación histórica que llevan a cabo por los centros educativos los miembros del Grupo de Recreación Histórica de Úbeda.

Montaje de Jose Manuel Troyano

La actividad se desarrolló el pasado viernes día 18 de enero y a ella acudió el alumnado y profesorado de 1º de Bachillerato y Ciclos Formativos de nuestra Escuela. Como ya pasó el año anterior la actividad fue promocionada a través de las redes sociales, ya que este tipo de actividades deben estar abiertas a la ciudadanía.

Pablo Antonelli y todos los componentes saben bien de lo que hablan, pues les entusiasma la Historia, viven el relato histórico y son fieles guardianes de un rigor que les ha valido para ser reconocidos en este mundillo al  haber sido el único grupo de recreación histórica que ha participado en el pasado año 2018 en los actos de conmemoración de la batalla de Verdún. Merece la pena escuchar lo que cuentan en las charlas y las anécdotas de sus viajes por media Europa con su grupo mientras se preparan para el taller ¿A que parece raro que haya españoles que se dedican a recrear hechos en donde nuestro país no participó?

Taller de la Primera Guerra Mundial

A las 10 de la mañana. Pablo Antonelli y Jesús González aparecieron en un aula abarrotada de alumnado uniformados como soldados británicos y dispuestos a que en los cuarenta y cinco minutos restantes, los asistentes pudiéramos sentir la alegría que vivió Europa cuando a principios del verano de 1914 se declaró la guerra en los Balcanes. Hemos podido sentir el frío, el hambre y el miedo de aquellos soldados que vivían, enterrados en vida, en las trincheras de Verdún. Nos hemos sorprendido con el arte de guerra que aquellos soldados no profesionales realizaban, durante las cortas treguas que dejaba el combate. Aquellos albañiles, carpinteros, escritores, enfermeras convertidos en soldados cobran vida en la imaginación de todos los que asistimos a estos talleres porque este tipo de actividades nos permiten poner nombres y apellidos a aquellas personas que lucharon por sobrevivir durante cuatro largos años.

Es un orgullo y creo que no somos conscientes de  la suerte que tenemos en Úbeda de contar con un grupo de personas, apasionadas de la Historia, que tienen la habilidad de transportarnos a otros lugares y otros momentos de la Historia a través de sus talleres de recreación histórica.

Taller de recreación histórica

La charla fue grabada y con el material resultante, monté el material con el objetivo de poner a disposición del resto del profesorado del proyecto la experiencia en la carpeta compartida, pues uno de los objetivos del aprendizaje basado en proyectos a partir de REAs es la difusión de aquellas experiencias de aprendizaje entre el profesorado.

 

¿POR QUÉ LO HACEMOS?

La razón principal de la realización de este tipo de talleres es que nuestro alumnado conozca la dimensión humana de un conflicto bélico. Que vea que los que lucharon en el frente, las mujeres que defendieron la retaguardia fabricando armamento para los soldados eran personas como ellos. Esa humanización del relato histórico genera un efecto transformador en los chicos y chicas que les lleva a ver las cosas desde otra perspectiva, al tiempo que les permite desarrollar, de una manera, más consciente y sentimental, la tarea estrella del proyecto La Guerra que cambió el mundo: las Cartas desde el frente.

 

Por unos días, se meten en el papel de una pacifista, de un soldado norteamericano de la aviación, de una espía, de una madre, de una hija,…e intentan, con esas breves líneas, experimentar lo que pudieron sentir, pensar, sufrir aquellos héroes y heroínas en tan duros momentos. Los talleres de recreación histórica aportan ese plus de motivación que les permite despertar el interés por conocer qué fue de aquellas personas, cómo vivieron aquellos momentos y, sobre todo, desean recibir la carta que puedan responder de sus compañeros de los otros IES. Ellos y ellas son conscientes de que quien escribe esas palabras ha sentido cosas parecidas cuando contempla el drama humano reflejado en sus palabras. Creo que. por un instante, se identifican con ellos y con ellas y, porque no, hasta sueñan con aquellos pasajes que han recreado en sus cartas.

Creo que esa es la mejor victoria que podemos obtener de actividades como estas. El docente, saca sus clases a la calle y busca en el seno de la comunidad, aquellos recursos que permitan desarrollar una enseñanza inclusiva. Las cosas están cambiando y me gusta el enfoque que está tomando la enseñanza en centros como los que participamos en este tipo de proyectos colaborativos. Entre todos los que formamos la Comunidad Educativa debemos conseguir que otra educación sea posible.

Los talleres de recreación histórica, un recurso docente que humaniza el hecho histórico