Siempre he estado convencido de que dos de los pilares en los que se debe sostener todo proceso de enseñanza-aprendizaje son la autonomía y en la creatividad del alumnado.
Con estos dos principios conseguimos la personalización del aprendizaje, que otorga un elemento añadido importante para que nuestros alumnos y alumnas consigan todos sus objetivos.
El modelo «flipped» saca un máximo partido de las herramientas digitales y de la web 2.0 para poner la experiencia, conocimientos y creatividad del profesorado en manos de los alumnos para hacer que los contenidos sean reales y aplicables en la sociedad actual.
La escuela ya no es lugar único en donde aprendemos ni tampoco es el lugar en el que se materializan todos las competencias que nuestros estudiantes necesitarán para la sociedad actual. La fuente inmediata de información de estos estudiantes ha dejado de ser el profesor, que pasa a tomar un papel más de guía o de facilitador del aprendizaje.
Las sesiones expositivas en la que el docente es concebido como un «sage on the stage» (un sabio sobre el escenario), han estado y siguen presentes en toda la educación de nuestro país. En estas sesiones, los profesores y maestros instruyen a una cadena se sujetos mediante la recitación de contenidos que se convierten en el elemento esencial que se evalúa en pruebas escritas.
Este modelo de «aprendizaje» únicamente refleja las habilidades cognitivas de orden inferior (Low Order Thinking Skills- LOTS): recordar y entender. Estamos, en un escenario erróneo en el que el modelo tradicional de enseñanza no profundiza ni evalúa las habilidades que todo alumno debe haber obtenido.
Nos referimos a la serie de habilidades que llevaría a cualquier estudiante a hacer personales todos los contenidos y asimilarlos de un modo más competente: hablamos de las habilidades cognitivas de orden superior (High Order Thinking Skills HOTS) que trabajan la aplicación, el análisis, la evaluación y, finalmente, la creación.
La consecución de estas habilidades tiene que partir de un nuevo modelo de aula, apoyado en metodologías activas que son las que nos aseguran el éxito del proceso educativo. Debemos abandonar las conferencias de aula y comenzar por darle el protagonismo al alumnado en clase, invirtiendo además nuestra propia praxis docente; un modelo «one-size-fits-all» que no pone a prueba las habilidades y capacidades de nuestros estudiantes.
Y es aquí donde la clase invertida o inversa (flipped classroom) se sustenta. ¿Por dónde podemos comenzar? El modelo «flipped» saca un máximo partido de las herramientas digitales y de la web 2.0 para poner la experiencia, conocimientos y creatividad del profesorado en manos de los alumnos para hacer que los contenidos sean reales y aplicables en la sociedad actual.
Partiendo de la grabación de contenidos previos o preparación de materiales para su lectura en casa, el alumnado verá un vídeo previo a la clase en el que su profesor explicará los conceptos más importantes de la unidad y que serán trabajados en el aula.
El profesor dedicará toda la sesión de trabajo con los alumnos a asesorar, aclarar y reforzar con otras tareas o metodologías como por ejemplo ABP, Just-in-time teaching o CBL, entre otros.
El diseño de una secuencia flipped responde a un modelo similiar al de otros aprendizajes activos, como el del siguiente Canvas, diseñado para la aplicación en el aula de los REA de ‘English speaking cities’ del proyecto EDIA de CeDeC.
Otro ejemplo sería el del proyecto «Cervantes en mi ciudad».
Para la creación de una sesión flipped debemos tener en cuenta los siguientes puntos:
- Los vídeos no deben durar más de 5 minutos.
- Deben incluir preguntas aleatorias durante la visualización para asegurarnos la atención. Prueba Educanon o Edpuzzle, son muy intuitivos.
- Podemos conseguir vídeos en la red (YouTube, Khan Academy…), hacerlos nosotros mismos y crearlos con apps de dispositivos móviles (Explain Everything, ShowMe, Touchcast…)
- Huyamos de la edición profesional: herramientas Screenflow, Screencast o’matic o Camtasia grabarán tus presentaciones.
- Edmodo te ayudará a gestionar tu aula: recursos, evaluaciones, pruebas, cuestionarios, documentos compartidos con tus alumnos, familias…
- Comienza la clase lanzando un Kahoot o Socrative para conocer lo que han aprendido. ¿No tienes tablets en el aula? Usa Plickers.
- Asigna las tareas a los grupos de trabajo y circula para atender dudas, aclarar conceptos…etc
- Puedes terminar la clase mediante un exposición, lanzando otro Kahoot… Es muy positivo concluir con gamificación, ya que les refuerza mucho lo aprendido.
El anterior vídeo es uno de los generados para el aprendizaje de Latín con Flipped Classsroom y disponibles en el canal 4ESO Latín de Youtube. Como señalaba, anteriormente, hay mútiples herramientas para la generación de vídeos útiles para nuestras experiencias flipped. Los siguientes serían dos ejemplos:
- ‘The adverbs of frequency‘ (Vídeo edutado con Educanon).
- «Latín. Introducción. Declinaciones» (Vídeo editado con Edpuzzle).
Como muestras de los buenos resultados de la metodología Flipped Classroom me gustaría destacar mi experiencia positiva combinando el modelo flipped con otras metodologías, especialmente, el Aprendizaje basado en proyectos (ABP) y desarrollando mis evaluaciones con rúbricas, cuyos indicadores son reales en cuanto a las habilidades o destrezas usadas, en vez de un número o nota, que pretende reflejar los aprendizajes del alumnado.
El modelo flipped sí llega a todos los alumnos ya que nos permite ubicar el aprendizaje en cualquier lugar, en cualquier momento y a cualquier hora. Disponemos de las herramientas TIC para mejorar nuestra enseñanza, por lo que abandonar el modelo instructivo es solo cuestión de decisión.
Existen comunidades como The Flipped Classroom, Flipped Learning Network o el grupo FlippedEABE en Google+, así como encuentros de innovación docente como el EABE o Aulablog en los que compartir y difundir nuestras experiencias se ha convertido en todo un éxito año tras año.
Debemos concienciarnos de la brecha digital existente en nuestra sociedad, en nuestras aulas del siglo XIX con profesores del siglo XX y alumnos del siglo XXI.
Benjamin Franklin afirmó que existen tres tipos hombres: los inamovibles, quienes piensan que deben seguir como están y que todo es una moda pasajera; los movibles, quienes están dispuestos al cambio y quieren aprender; y finalmente los que se mueven.
Dentro estos últimos creo nos situamos los que creemos que otra educación es posible y que nuestros alumnos de hoy no son los que éramos nosotros; los que nos demandan otro tipo de enseñanza que les prepare para su futuro de un modo real. El modelo flipped classroom puede ser una vía para movernos y mover a nuestros alumnos.
Recursos de consulta
Experiencias Flipped
- «Flippped Classroom. ¿Damos el salto?»
- «Experiencias y proyectos de innovación»
- «Flipped en FP: creatividad, autoestima y autonomía»
Metodología ABP
Referencia de ilustraciones
Gamificación con Plickers (antes o después de la unidad flipped). Domingo Chica.
Consumopolis 2007. Andreu Rabassa en Flickr (CC BY SA)
Autor
Domingo Chica Pardo
@dchicapardo
DCP San José, Vélez-Málaga (Málaga)
Flipped & blogger.
Edmodo Certified Teacher.